nadie sabe para quien no trabaja
sábado, 19 de marzo de 2011
La fenomenologia de los Volumenes
jueves, 24 de febrero de 2011
El posible último verso a ella
Hora póstuma
Sera acaso cierto que solo una vez en mi vida me vendí a alguien de manera real. No lo sé a ciencia cierta.
Que entre a su vida, a veces disfrazado. Que disfrazado no fui bueno pero hice el intento.
Que naturalmente nació y nace una sonrisa con la suya, con su infinita esencia.
Siento que no necesito pensar, reflexionar o motivarme para entregar mi vida en una promesa por aquella persona.
Sentir que mis palabras debían trascender el lenguaje pues en mi conciencia, mi moral se mostraba así, o tal vez quería que fuese así para que no se mezclen en el rio de las otras, de la de lobos, de las de él.
Me declaro esclavo de los ojos vivos, de los ojos de ella, creo que en ello se basa mi juicio. Sus ojos dormidos que miraban a otro lado eran mi anhelo, mi promesa de felicidad.
Muchas veces en mi vida me he estrellado contra la disolución de una ilusión mas esta penetra este silogismo, lo quiebra penetrando mi propio amor propio.
De que lógica me puedo sustentar si cada día me siento tentado a raptarte, a llevarte lejos de su limitado amor.
Que podrá saber el del amor si no te ve como yo junto a la luna y el mar.
Que podrá darte el si no está dispuesto a morir en fuego por un segundo a tu lado.
Muchas veces pensé en lo ilógico humano ficticio y soso que veras mis versos que lanzo a tu pecho. Muchas veces me vi desfigurado de crítica al verme lanzado a esa lava que serán los recuerdos de tus conocidos.
Me gustaría saber que hice mal, que me falto para poder reclamar tus besos. Que hice en mi imberbe actuar para no poder oler tu cabello, mirar tus labios.
Pido perdón por no ser ese, quien mueva tus latidos. Por ser un soñador torpe que pelea en su adentro por nacer nuevamente para ti.
Algún día sabrás que eres tu quien motiva estas palabras.
No, nunca lo sabrás.
Nuestros eternos acuerdos me impiden decirte que eres la que roba mi idea de felicidad cada cierto tiempo.
Y debo decir cada cierto tiempo, porque conozco a cada quien con intención de crear eso.
Eso que tú hacías con solo sonreír ausentando tu deliciosa voz.
Era eso.
Era eso lo que muchos llaman locura, lo que muchos llaman estupidez, lo que tú y yo vivíamos.
Eso creía yo.
Ilusión.
Ambición.
Me resulta difícil encajar en alguna de estas barcas aquello que sentía.
Si tan solo una vez oyera de ti algo, un indicio, una silaba, un sonido de tu dulce amor. Juro hoy y mañana, en mi más maduro yo que no pararía, así la muerte, así la vida, así lo oscuro para tenerte.
Pues nadie entendería nunca lo que es esto, lo que eres tú. Lo que soy y lo que fui yo ante ti.
domingo, 16 de enero de 2011
conversa
Mi vida ha sido esto. cambie de ambientes y no me sumergi en acciones parametradas por mi contexto. tengo mas libertad dentro de mi cuarto que sientos de muchos en una disco haciendo lo que la larga fila hace.
Joder. Estoy escupiendo bilis en el teclado. le doy mas importancia de la que deberia, pero es que esta situacion me tiene harto.
¿Como comenzo todo? le dije un comentario simple. en tono brulesco le dije: no escucharia esto frente a mas amigos porque seria gay, el mundo de los tios es mas inflexible, y es la verdad. nadie mas que yo entiende lo que es ser jodido por un grupo de presidiarios enlatados en un salon de clase. ella dijo algo como: no vengas con cojudeces. ¿ella entiende el mundo vomitivo que pase? no...
Presumir, dar catedra de lo que sabe en su experiencia superificial no tiene porque ser un arma contra mi. abofeteandome con jodida vehemencia.
viernes, 31 de diciembre de 2010
Año Nuevo
Felizmente la historia que les contare a continuacion tiene mucho de diferente. Para empezar cuando salia, poniendo las llaves en mi bolsillo, sono mi celular. Vaya novedad. Suena, normalmente, para que me lleguen mensajes de novistar. pero no... en esta ocasion era el chino Lucho contandome que queria verme en su casa, para ayudarlo con un asunto.
Eligiendo entre dar una vuelta o ayudar a alguien, elegi lo segundo (no soy caritativo, solo queria sentir algo de utilidad en mi).
-si?
-disculpe, ¿se encuentra Luis?-dije, en lo que la puerta me interrumpia, abriendose.
-hey, ¿que fue?-le dije, mientras los saludaba y me sentaba en su mismo sofa.
-nada tio, sino que mi vieja me dijo que pagara la luz y es una huevada ps.
-y quieres que te acompañe.
-es una huevada, hoy todavia hay una colaza- me hablaba a la distancia, mientras recogia una gaseosa de su refrigeradora.
-pasate una.
-¿helada?- me dijo, mostrandome una cerveza.
-no ps huevon -le replique largamente.
-jaja, era broma, toma, vamos.
carajo. la cola no tenia final.
-y ese sol de mierda que hace-le dije, llegando a la mitad de la gaseosa. la ventaja de visitar seguido a Luis es que siempre tenia algo que ofrecer.
-jaja, ya no te quejes tio.
-encima esta huevada de cola se pone en la zona donde no hay sombra, mierda.
-jajaja, verdad ¿no? no te preocupes la sombra nos alcanzara en algun momento.
-¿cuantas horas piensas estar aqui, ah? pronuncie alejandome de su ubicacion en la fila.
-¿a donde vas?
- a mi jato, me llego. voy a comprar algo y vuelvo.
-comprame algo de pasada pues.
-haber, haber- mientras me acomodaba el short, le dije-. No jodas oye, me das 20 lucas, no me va a cambiar.
-tu crees.
-ya ya pasate, vere que hago.
camine unas cuadras buscando una buena bodega, con menudo calor en mi espalda, hasta que me adentre en una bodega algo grande.
-¿me acompañas a comprar algo de comer?- me dijo nilda, mientras bajamos la escalera del pabellon A de la facultad.
-vamos.
-¿como te fue en el examen de calculo?
-creo que bien, creo que bien -añadi.
-deme una empanada y una gaseosa-le dijo a la señora-¿tu quieres?
-estoy bien.
mientras volvimos recorde una imagen y no pude evitar contarselo.
-nilda, termine la relacion.
-¿que paso?
-bueno, -le dije, sentandome- creo en algo, creo que pienso cambiar en algo.
quiero hacerte caso. quiero cambiar mi manera de pensar en esto.
-sientate, quiero hablarte de algo.
despues de haber movido de un lado para otro esa bebida, solte mis palabras.
-Maria, cuando estoy contigo me siento bien, siento que me gustas. te quiero. quiero que seas mi enamorada. no quiero alguna excusa, quiero saber si sientes lo mismo por mi.
-yo lo siento, pero...
-dime las cosas como sean.
-no, no siento lo mismo por ti.
-ya veo. entiendo. no pasa nada, ademas fue un peso menos encima de mi.
-Nilda, crees en la espera ¿verdad?
-siempre te lo he mencionado.
-yo creo que si no sentia lo indicado para este tiempo, no esta mal cortar por lo sano. no queria que pensara que sentia algo que no...
-entiendo...
compraba mirando a la chica de blanco mirandome igualmente. era paralizante. era satisfactorio. era como imaginaba que debia ser.